LAS NIÑAS EN LA INDIA
Cada año UNICEF denuncia la “desaparición” de dos millones y medio de niñas en la India, sobre todo en las zonas más desarrolladas del país, fruto del feticidio y los asesinatos directos o indirectos.
La realidad muestra una estampa muy cruel, en la India se conserva la costumbre de la dote, los padres de las niñas deben pagar a la familia del novio para pactar el matrimonio, y son muchos los progenitores que prefieren matarlas o dejarlas morir por desnutrición.
Niñas de todas las edades se ven sometidas a esta práctica pero a esto hay que añadir, ser víctimas del tráfico infantil.
Con el fin de acabar con estos crímenes, el Gobierno indio va a poner cunas en todos los distritos del país para que los padres dejen abandonadas a sus hijas en lugar de matarlas o dejarlas morir, así al menos mantendrán su derecho a la vida, Renuja Chowdhury, la ministra de la Mujer y el Desarrollo infantil, así lo afirma, “No me importa si la medida puede incentivar el abandono de las niñas. En cualquier caso es mejor eso que matarlas”.
La triste realidad de la India así como de otras muchas partes del mundo nos debería hacer reflexionar sobre la sociedad que hemos generado y lo poco que hacemos por cambiarla.
Cada año UNICEF denuncia la “desaparición” de dos millones y medio de niñas en la India, sobre todo en las zonas más desarrolladas del país, fruto del feticidio y los asesinatos directos o indirectos.
La realidad muestra una estampa muy cruel, en la India se conserva la costumbre de la dote, los padres de las niñas deben pagar a la familia del novio para pactar el matrimonio, y son muchos los progenitores que prefieren matarlas o dejarlas morir por desnutrición.
Niñas de todas las edades se ven sometidas a esta práctica pero a esto hay que añadir, ser víctimas del tráfico infantil.
Con el fin de acabar con estos crímenes, el Gobierno indio va a poner cunas en todos los distritos del país para que los padres dejen abandonadas a sus hijas en lugar de matarlas o dejarlas morir, así al menos mantendrán su derecho a la vida, Renuja Chowdhury, la ministra de la Mujer y el Desarrollo infantil, así lo afirma, “No me importa si la medida puede incentivar el abandono de las niñas. En cualquier caso es mejor eso que matarlas”.
La triste realidad de la India así como de otras muchas partes del mundo nos debería hacer reflexionar sobre la sociedad que hemos generado y lo poco que hacemos por cambiarla.